''Si no existía un plan social no convenía seguir con la licitación''

El pasado 6 de agosto el SEP decidió poner fin a la licitación del Puerto de Talcahuano apenas cinco días después de la puesta en venta de las bases. El proceso y la determinación no estuvieron exentos de conflictos. A las protestas de los 26 trabajadores del puerto y los embaladores se sumó la evidente presión política del SEP que “recomendó” detener la concesión a privados del Terminal encontrando el rechazo primero y la renuncia luego de tres de sus directores incluido el presidente del directorio de la compañía, Claudio Agostini, quien fue reemplazado por Eliana Caraball.

Según el Consejo del SEP, se suspendió el proceso porque los planes de expansión de los puertos privados de la región, "permiten prever que la licitación del único puerto público, que representa menos del 2% de la capacidad de transferencia de la VIII Región, no contribuiría significativamente al desarrollo portuario de la zona". Sin embargo niegan que las protestas de los trabajadores y el apoyo recibido por algunos parlamentarios hayan influido en algo.

¿Decisión política o económica?, MundoMaritimo conversó al respecto con Gastón Saavedra, Concejal de Talcahuano y  representante de los trabajadores en el Directorio de la Empresa Portuaria.

¿Cuál fue el principal argumento de los trabajadores para frenar la licitación?
Nadie se va a oponer nunca al progreso, entre esos estamos los dirigentes sindicales y los trabajadores, que queremos que Chile progrese porque nos deberíamos beneficiar todos. El problema está en que a veces los frutos del progreso no son percibidos por los trabajadores. Si se levantan procesos de licitación sin considerar el factor humano, el recurso que hace posible que las empresas y el país crezcan, obviamente van a contar con nuestra oposición. Nosotros aprendimos que después del proceso de licitación de San Vicente, hubo impactos de los que nadie se ha hecho cargo. Si no existía un plan que resolviera el problema social de buena forma no convenía seguir con el proceso.

¿Qué condiciones debieran existir para contar con el apoyo de los trabajadores?
Es básico y elemental que cualquier proceso de cambio profundo a la estructura de una empresa cuente con la anticipación e integración plena de los trabajadores y se les pregunte. Lo que nosotros reclamamos es que si hay una decisión política de licitar, que se asuman todas sus consecuencias; aquí no hay ningún plan estratégico ni de la ciudad ni del puerto ni del gobierno para que cuando se licite lleguen de pronto 2 millones de toneladas a Talcahuano, ¿se imagina el impacto vial de aquello con sólo una vía de acceso?. Eso no se ha resuelto.

Se justifica la privatización de Puerto Talcahuano

La contabilidad arroja rentabilidad y número azules a pesar de todas las dificultades, pero además no hay que olvidar que los planes de gestión anual del puerto apuntan a licitar, no a hacer nuevos negocios, no a captar más carga. Los trabajadores sabemos que hay un montón de carga dando vuelta, hay 300 mil toneladas de sal en el mercado regional de la carga, muy importante porque se necesita para el proceso de blanqueo de la celulosa, ¿por qué no podría estar una parte de ella en Talcahuano? Vamos a finalizar el año con cerca de las 280 mil toneladas transferidas y un crecimiento del orden del 5%. No esa malo para el tamaño del Puerto.

¿Cuál sería la consecuencia de desempleo si se hubiera llevado a cabo la Licitación?
Hemos estimado que un poco más de mil personas quedarían cesantes en Talcahuano, sin ningún tipo de seguridad social; incluso mucha es gente de más de cincuenta años a la que resulta casi imposible reubicarse en otro empleo.

Cuénteme un poco del impacto social sufrido en San Vicente
Yo soy concejal y mucha gente llega a pedirme canastas familiares para llegar a fin de mes, hay personas que hicieron emprendimientos para pequeños comerciantes y todo eso fracasó. Los trabajadores cesantes que salieron de la empresa portuaria y no tuvieron beneficios en el campo de la seguridad social hoy la están pasando muy mal, los estibadores también e incluso aquellos que fueron subsidiados por algún recurso; eso ya se acabó y hoy engrosan el desempleo estructural de Talcahuano, 12,9 % y yo te aseguro que tres puntos de aquello lo conforman personas que pertenecían a la logística que se desarrollaba en torno al puerto. Por eso pedimos que haya una evaluación en el ámbito de lo social también, porque nadie discute que desde los números y los flujos de cuenta las empresas han resultado exitosas. El SEP debe no solamente preocuparse del rendimiento económico de las ofertas.

El SEP y la presión política.

¿Reconoce que hubo presión política en la salida de los directores que se oponían al freno de la licitación?
Antes que todo, una consideración. Toda persona que participe del directorio de alguna empresa es nombrado no por su currículum ni por simpatía, si no por sensibilidades políticas, el que diga lo contrario miente. Por tanto, el dueño de las empresas públicas es el Estado y su gobierno de turno es quien toma decisiones respecto de qué hacer o no hacer con ellas. Quienes sean sus directores deberán seguir esas directrices de lo contrario tendrán que renunciar. Aquí no hubo presión política, hubo simplemente el ejercicio de algo que está explicitado tácitamente.

¿Salieron voluntariamente?
Así fue, aunque digan lo contrario. Ellos no estaban de acuerdo con la política del gobierno en ese momento, y yo valoro la actitud de Agostini que reconoció que su línea era distinta a la del gobierno..

¿Los trabajadores frenaron la licitación?
Siempre la organización sindical tiene un rol importante en las sociedades. Acá se hizo lo que aconsejaba el momento y de acuerdo a las capacidades que nosotros teníamos, creo que tuvo su valor pero es que hay algo muy importante, que no está siendo resuelto y que nosotros no estamos dispuestos a avalar.

¿Se va a licitar Talcahuano próximamente?
Es que eso lo va a decidir el gobierno, si lo dispone así y se resuelven todas las situaciones que están pendientes habrá que conversarlo en su momento, pero no es una decisión nuestra.

Le cambio la pregunta, ¿cree que hay voluntad política del gobierno para mejorar las condiciones de la licitación?
Vamos a ver…Yo creo que hay que terminar con las visiones ortodoxas. Es cierto que las licitaciones de hace 10 diez años han resultado exitosas pero fue en un momento histórico en que el país no tenía recursos, hoy hay que tomar las cartas y verlas de nuevo. Hoy lo que queda por licitar son todos puertos pequeños y me entra la pregunta ¿será posible que a lo mejor algún puerto sea sólo de carácter público? ¿Por qué no es posible en una economía como la Chilena? Así no se va a privilegiar nunca  a las medianas y pequeñas empresas. Esa es nuestra bandera y queremos que sea asumida

Por MundoMaritimo