La intención de diversificar sus operaciones y ampliar su giro para proveer servicios logísticos y de carga es una forma de anticiparse al cambio estructural que prevé Sumitomo Corporation para una de las actividades que realiza en Mejillones: la importación y almacenamiento de ácido sulfúrico, a través de Interacid, informa El Mercurio.

Junto a la filial Metal & Mining, en sociedad con la canadiense Teck, impulsarán la fase II de Quebrada Blanca, para la cual comprometieron US$ 1.200 millones por el 30%. La multinacional, que es una de las más diversificadas de su país -con utilidades por US$2.900 millones, equity que supera los US$24.000 millones y presencia en 66 países, sigue buscando crecer en las seis líneas de negocio que mantiene en Sudamérica, como parte de un plan de inversión global a tres años que supera los US$11.000 millones.

En este proceso, Chile es uno de sus focos, comenta el gerente general de la operación regional, Haruo Matsuzaki, que hace uno año fue transferido a la sede de la compañía nipona en Sao Paulo, donde además ejerce como presidente de los negocios de Sumitomo Corporation en Brasil.

Según El Mercurio, la inversión en minería y algunos servicios asociados a esta actividad, como el almacenamiento y trading de ácido sulfúrico para algunos de sus procesos es la actividad que ha predominado durante estos años. Además de la mencionada expansión de Quebrada Blanca, Sumitomo participa en las minas Candelaria -donde es socia de Lundin- y en Sierra Gorda, la iniciativa que impulsa la polaca KGHM y que durante sus primeros años de operación ha enfrentado diversos problemas, lo que incluso obligó a la japonesa a castigar esta inversión en más de US$700 millones.

"Chile es el mayor productor de cobre del mundo, y el cobre es indispensable para la economía global, entonces si quieres hacer un negocio en Chile no puedes evitar hacerlo en la minería del cobre", resume el ejecutivo.

Más servicios logísticos para el norte

Matsuzaki explica que, si bien la inversión en producción de cobre es muy importante para la compañía, tienen la intención de diversificar sus operaciones y ampliar su giro para proveer servicios logísticos y de carga para esta industria, como una forma de anticiparse al cambio estructural que prevén para una de las actividades que realizan actualmente en Mejillones: la importación y almacenamiento de ácido sulfúrico, a través de Interacid, donde Sumitomo Corporation tiene el 100% de la propiedad.

Con más de 20 años de experiencia, esta filial opera un recinto de 30 hectáreas en la bahía de Mejillones, de las cuales 18 están aún sin utilizar, y donde posee infraestructura portuaria para el manejo y despacho de este insumo, que es clave para algunos procesos de la minería, como la producción de cobre en cátodos. Entre sus clientes, la japonesa tiene a Codelco, BHP, Antofagasta Minerals y Anglo American. Al año mueven del orden de dos millones de toneladas de este producto, según El Mercurio.

Matsuzaki explica que su intención es ampliar y transformar las instalaciones de Interacid para poder recibir, almacenar y embarcar concentrado de cobre. "Sabemos que habrá un aumento en la producción de concentrado de cobre, que se estima en poco más de tres millones de toneladas anuales, lo que abrirá la necesidad de la industria. El proveer un servicio estable en el tiempo podría convertirse en un cuello de botella para la industria minera en el futuro, y entendemos que, al mismo tiempo, la industria minera está esperando más competencia y la introducción de un nuevo actor en la industria de la logística", asegura.

El ejecutivo se refiere a que solo el puerto de Mejillones, ligado a Ultramar y a la constructora Belfi, es el único que ofrece este servicio a las empresas que sacan su carga de concentrados por esa zona. En Antofagasta también opera el puerto de Antofagasta, pero por estar ubicado en el centro de la capital regional, podría enfrentar limitaciones para adaptarse al incremento de la producción de concentrados que se proyecta.

"La industria minera está ansiosa, porque son adversos a tener concentración y están esperando que llegue un player con una reputación que les dé confianza. Tenemos una muy buena ubicación en la bahía de Mejillones, más de 20 años de experiencia trabajando en esta área y tenemos una muy buena relación con las grandes mineras, como Codelco, BHP, AMSA y Anglo American", dice el gerente de Sumitomo Corporation para Sudamérica.

Si bien aún están estudiando el proyecto para adaptar el puerto, a fin de definir el monto de inversión y el timming de ejecución, en Sumitomo tienen claro que la oportunidad de negocio se dará dentro de tres o cuatro años, y en ese momento deberían haber concretado este proyecto, porque el incremento en la producción de concentrados en desmedro de los cátodos, impactará al negocio principal de Interacid, pues el mercado del ácido sulfúrico sufrirá un rebalanceo "Nos gustaría tomar la decisión antes de que se produzca el cambio en el mercado", comenta.

"La contracción que se avizora en el mercado del ácido sulfúrico podría mantenerse, y eso se explica, en parte, porque estamos pensando en diversificarnos hacia nuevos servicios para la minería", agrega Matsuzaki.

La logística de combustibles

Los terrenos de Interacid son prácticamente los únicos que quedan disponibles en el sector, ya que el resto de las zonas con aptitud para el desarrollo portuario corresponden a terrenos fiscales, cuya enajenación es muy compleja, explica el ejecutivo. Por esta razón es que otra de las alternativas que barajan es acondicionar su recinto portuario para el almacenamiento de combustibles, ya que hoy solo le prestan el servicio de recepción y traslado de estos productos al terminal que Copec y Enex tienen en esa zona. Estos volúmenes equivalen al 90% de los consumos de la Región de Antofagasta. "Una de las posibilidades que estamos analizando es prestar servicios de almacenamiento, tanto a las compañías que ahora tienen presencia en Mejillones como a cualquier otra ", apunta el ejecutivo japonés.

Por MundoMarítimo