Es un convencido de que el puerto de Buenaventura es una ventana de oportunidad y optimismo. No le interesa que suene a frase repetitiva para muchos. Lo dice por los casi 30 años de trabajo en esa ciudad, la misma que le ha dado todo, pero también a la que ha ayudado con empleo y calidad de vida a su gente.

También está convencido de que la única fórmula para derrotar la violencia tiene dos componentes, empleo y educación, y esa fórmula está en manos de los empresarios y la clase política. “Debemos trabajar juntos, sin egoísmos, para sacar adelante a Buenaventura”.

Así habla Óscar Isaza Benjumea, presidente del Grupo Empresarial del Pacífico, Gepsa, organización que ha invertido US$1000 millones en los últimos años para impulsar obras en la Terminal de Contenedores (TCBuen), en Datacontrol (una operadora portuaria) y en construcciones en la ciudad, como el Pacific Trade Center y el centro comercial Brisas Plaza Shopping, entre otras.

Las inversiones no se detienen allí. En este momento trabaja en la futura construcción de una moderna terminal energética que funcionaría en Puerto Solo. Para que ese proyecto sea una realidad, falta la regulación de la Comisión de Regulación de Energía y Gas y participar en la licitación.

El Grupo también contempla la construcción de una planta de almacenamiento de petróleo y otra de gas propano. “Se trata de una obra de gran envergadura, clave para el Valle, que además generaría mucho empleo y nosotros estamos firmes para hacerla si nos dejan”, reveló Isaza.

¿Qué empresas maneja el Grupo?
Datacontrol, que es la operadora más grande en Buenaventura en materia de operación portuaria terrestre. Allí tenemos 530 empleados con contrato a término indefinido.

También hace parte la Corporación Brisas del Pacífico y hasta hace poco tiempo la Fundación Nuevo Pacífico, que ahora pasará a manos de PIO, otra empresa que acabamos de constituir.

El Grupo también tenía acciones en la Sociedad Portuaria Regional. ¿Finalmente las compraron los árabes?
No. Esas acciones no quedaron en manos de ellos. Las acabamos de vender al Grupo Parody. Nosotros teníamos el 7 %. Lo mejor de esa operación es que una empresa colombiana se quedó con ellas, lo que demuestra la confianza nacional por invertir en el Puerto.

¿Entonces Gepsa se quedó con TCBuen y con qué otras empresas?
Sí. Nosotros tenemos el 32,5 % de participación en TCBuen. El mayor accionista es TCB, que es el Terminal de Contenedores de Barcelona. Entre los dos grupos controlamos TCBuen.

En Puerto Caldera, que funciona en Costa Rica, tenemos dos puertos, uno granelero y otro de contenedores.

Me habló de PIO. ¿Qué es?
Es una compañía de Óscar Isaza que significa Puertos, Inversiones y Obras. A través de ella estamos estudiando con mucha dedicación el desarrollo de un puerto energético, que funcionará en Puerto Solo. Es una zona de 150 hectáreas que nos dieron en concesión. Está ubicada entre TCBuen y la Sociedad Portuaria. Ojalá que nos la dejen hacer.

¿Qué hace falta para arrancar con ese proyecto?
El marco regulatorio de la Creg (Comisión de Regulación de Energía y Gas), el cual deberá establecer que el Pacífico colombiano también puede tener una oportunidad de suministro de gas. Nosotros hemos expresado al Gobierno toda la voluntad para invertir y hacerlo, pero habrá que esperar el proceso de licitación.

¿Han encontrado respaldo del Gobierno?
Todo. La verdad es que nos han brindado todo su respaldo a través de la ANI, la Consejería para la Gestión Pública y Privada y el Ministerio del Transporte, entre otros.

¿Qué se hará en Puerto Solo?
Es un gran proyecto que tiene varios componentes. El primero es una terminal de regasificación de gas. Ese complejo permitirá importar gas y traerlo también de la Costa Atlántica por barco. La idea es regasificarlo en Buenaventura y construir un gasoducto. Esta planta les dará a los vallecaucanos la posibilidad de gas a un precio más competitivo que el que se paga hoy. Además, si el día de mañana se presenta un problema en la tubería actual, este sistema podrá abastecer a los usuarios.

¿Qué otros componentes tendrá?
Un terminal de gas propano y butano. Ese es el gas que los habitantes del Pacífico comprarían en pipas. El Gobierno quiere masificar el propano para volverlo un combustible limpio y barato, y nosotros podemos hacerlo en el Puerto. Separamos el butano del propano y el excedente se podrá exportar a los mercados de Chile y Ecuador.

Otro proyecto que se contempla allí es una planta de almacenamiento de hidrocarburo crudo. Sin duda alguna, por Buenaventura se deberá exportar crudo hacia China sin necesidad de pasar por el Canal de Panamá. En Puerto Solo también construiremos un patio de contenedores que se convertirá en la cuarta fase de TCBuen.

¿Lo que usted plantea es seguir creyendo en el Puerto y convertirlo en un polo de desarrollo?
Claro. Mire, si el Valle del Cauca tiene un Puerto por qué no nos preparamos y nos volvemos más competitivos teniendo una alternativa de energía que llegue por Buenaventura.

¿Qué necesita el Valle para ser más competitivo?
Que nos tomemos todos de las manos y digamos vamos para adelante, sin volvernos un cangrejero. En Buenaventura decimos que un cangrejo no puede salir del cesto porque cuando va arriba lo bajan los demás. Y eso nos pasa a los vallecaucanos. La idea es que nos juntemos y creamos que el Valle del Cauca es una tierra privilegiada, que tiene gente buena, capaz, pero debemos dejar los egoísmos. Cuando hablan de la Alianza del Pacífico el representante es el Valle del Cauca, pero también se puede mirar alrededor, Cauca, Nariño, incluso el Eje Cafetero y el mismo Antioquia.

¿Muchos colegas suyos están de acuerdo con lo que dice y desde hace tiempo se habla de unión, pero cuándo se pasará a la acción?
Esto va a cambiar cuando nos pongamos de acuerdo la clase política y los empresarios. Debemos seguir trabajando con dedicación y capacidad. Para ello debemos ponernos de acuerdo para rediseñar a Buenaventura. No nos podemos olvidar que Buenaventura es una ventana de oportunidad y optimismo.

¿Retomando la gestión de Gepsa, cuántos empleos genera?
En las sociedades a las que nosotros pertenecemos fácilmente hay unos 1500 empleos directos y por lo menos 4000 indirectos. Nosotros invertimos y creemos en Buenaventura.

¿Cuánto suman esas inversiones?
Suman mil millones de dólares. Eso es lo que se ha ejecutado entre los centros comerciales, el edificio Pacific Trade Center, TCBuen. A través de esa inversión hemos generado empleo y riqueza en Buenaventura y todo ha sido prestado de la banca que ha creído en nosotros.

¿Señor Isaza, es claro que se está invirtiendo y han generado empleo, pero qué hacer para reducir la violencia?
La única manera de derrotar la violencia es generando empleo y educar a la gente, pero no basta solo con educarla, a la gente hay que darle oportunidad de empleo. Tienen que darse las dos cosas.

¿No piensa que en Buenaventura el desarrollo solo es en el Puerto... en la ciudad no existe?
No. A Buenaventura tiene que llegar industria que genere más empleo, que la materia prima se pueda transformar, que lo que se importa por el puerto tenga un valor agregado.

Buenaventura tiene que ser un polo logístico de distribución física de carga, porque no tiene sentido llevar la carga a Medellín, hacerle un valor agregado allá y luego volverla a traer a Buenaventura. Mire, en tres años vamos a tener una doble calzada Bogotá – Buenaventura y yo le creo a este Gobierno porque está haciendo la tarea.

¿Qué les responde a aquellos que consideran que los empresarios que están en Buenaventura solo piensan en sus propios intereses?
Eso no es cierto. Que vengan y miren lo que hemos hecho en la ciudad y por la gente. Hemos ayudado a la población infantil. Hemos hecho inclusión social. Además, apoyamos al Gobierno que ha puesto en marcha un plan maestro muy importante para la ciudad.

Fuente: El País, Colombia